El chulquín se lava muy bien y se cocina en agua sal fuerte durante 40 minutos hasta que ablande, se bota el agua. Se pone a hervir el vinagre con los clavos, los cominos y la pimienta, se deja enfriar. Se le agregan el chulquín frío cortado en rodajas, el ajo, el ramillete de yerbas y la panela. Se deja reposar hasta el día siguiente, se ponen en un frasco de boca ancha que debe cerrar herméticamente, cubiertos con el vinagre de la preparación.
Tomado del libro Gran Cocina Colombiana, de Carlos Ordonez