En una sartén con aceité, fríe las patatas cortadas en rodajas finas. Sazona y resérvalas.
Prepara una bechamel rehogando la harina en mantequilla derretida y añadiendo leche fría poco a poco y sn parar de remover.
Coloca en el fondo de una fuente de horno las rodajas de patatas fritas y cubre con la bechamel qué habrás puesto a punto de sal. Espolvorea por encima con huevo cocido muy picado y el queso rallado. Gratina durante 3 minutos aproximadamente y sirve.